El Estadio de Wembley anota un tanto perfecto con los análisis del tráfico

El estadio de Wembley no necesita presentación. Esta maravilla de recinto de clase mundial celebra algunos de los eventos deportivos, musicales y de entretenimiento más importantes del mundo y recibe las visitas de más de dos millones de personas al año. Es la sede de la selección de fútbol de Inglaterra y, en ella, se celebraron las finales de fútbol masculino y femenino de los Juegos Olímpicos de Londres de 2012.

 

Reto empresarial

Desde el punto de vista de la salud y la seguridad, ¿cómo es posible saber, en un momento determinado, cuántas de las personas que acuden a un concierto se encuentran en el campo (terreno de juego), especialmente, cuando estas pueden moverse libremente de una zona a otra del recinto? Este fue el reto al que se enfrentaron los miembros del equipo del estadio de Wembley en mayo de 2010. El estadio nacional no puso impedimentos a que los asistentes a un concierto pudieran moverse libremente entre el campo y el graderío, siempre que se garantizara el cumplimiento del certificado de seguridad, que relaciona el número máximo de personas permitidas en el campo con el tiempo que se tardaría en evacuarlas en caso de emergencia.

En un principio, se plantearon las opciones habituales como la presencia de personal en los accesos al campo —desde el momento de la apertura de tornos— para realizar un recuento del número de asistentes manualmente o con la ayuda de dispositivos PDA. Sin embargo, había dudas sobre la viabilidad de tal práctica durante siete horas seguidas y con un grado de precisión razonable, especialmente, porque el campo podría llegar a albergar entre 20 000 y 25 000 personas en un determinado momento. Además, un recuento manual no es capaz de ofrecer información en tiempo real que permita tomar medidas.

El equipo informático analizó diversas tecnologías automatizadas antes de seleccionar una solución de análisis por vídeo de la empresa Axiomatic Technology Ltd. con sede en Nottingham. Axiomatic utiliza los sensores Brickstream para proveer a establecimientos como grandes tiendas de ventas minoristas, centros recreativos para niños e instalaciones con piscinas la información exacta sobre el número de personas que se encuentra en un área y las tasas de entrada y salida, tanto en tiempo real como a través de informes operativos.

Solución

Axiomatic aceptó el reto y diseñó una solución completa para Wembley. Se instalaron cámaras de vídeo para hacer un seguimiento de forma anónima del movimiento de las personas por una cuadrícula preconfigurada. Los dispositivos tienen la ventaja de que pueden seguir el movimiento de las personas en ambos sentidos, además de que pueden ajustarse para registrar recuentos únicamente cuando se cumplan unas condiciones establecidas. El software de Axiomatic utiliza fuentes de datos procedentes de los dispositivos instalados para mostrar las tasas de flujo y la ocupación total de cada una de las áreas seleccionadas en tiempo real. Los dispositivos suelen cubrir un ancho de entrada de unos 4 metros; sin embargo, pueden unirse para abarcar zonas más amplias.

Axiomatic y el equipo a cargo de los sensores Brickstream® de FLIR han colaborado con el personal del estadio de Wembley para preparar la red informática, instalar las cámaras de manera discreta y ofrecer visualización en tiempo real para su uso por parte del equipo de control de eventos. Tras un exitoso programa piloto en el que se cotejaron los datos de recuento de los sensores con una grabación de vídeo real y recuentos manuales, Axiomatic implantó la solución en los 36 vomitorios (entradas de túneles) utilizados por los asistentes a un concierto para entrar y salir del campo.

Desde el principio, la tecnología de análisis ha funcionado de una manera impecable, ofreciendo una tasa de precisión de más del 95 %. Gracias a la información sobre la tasa de flujo y a los datos de entrada de los tornos del estadio de Wembley ofrecidos en tiempo real, ahora es posible predecir cuánto va a tardar en llenarse el campo, así como la ubicación actual de los asistentes a un concierto (teniendo en cuenta los que quedan fuera del estadio, los que están en los vestíbulos interiores y los que ocupan realmente el terreno de juego). De esta forma, se aportan los datos fundamentales necesarios para garantizar el cumplimiento del certificado de seguridad, así como de otros requisitos legales.

El posterior análisis de los datos recogidos durante el evento ha servido para cuestionar los cálculos del diseño original sobre el número máximo de personas a las que se les permite el tránsito dentro y fuera del campo, a través de los vomitorios especialmente diseñados. El sistema también se ha usado para respaldar lo que hasta ahora solo han sido teorías sobre el movimiento de multitudes; por ejemplo:

    • Cuántas veces los asistentes a un concierto ingresan y dejan un paso de "flujo libre" (generalmente 4 veces)

 

    • Cómo el paso se llena entre el momento en que la banda soporte está tocando y el acto principal

 

    • Cómo tienden las personas a salir por el mismo vomitorio por el que entraron con independencia de dónde hayan acabado viendo la actuación en el campo.

 

  • Estas cuestiones han aportado, tanto al personal del estadio de Wembley como a las autoridades locales, la información real que documenta y mejora el modo en que pueden organizarse futuros eventos.

“Este es un sistema único y de un valor incalculable que ha permitido que las decisiones que se toman sobre el control de multitudes estén basadas en información objetiva y en tiempo real en lugar de en la observación y la formulación de teorías”, afirma Nick Woodhouse, responsable de cumplimiento normativo en materia de salud y seguridad del estadio de Wembley. “Algunos de los eventos que vamos a acoger este año resultarían muy difíciles de controlar sin la ayuda de esta tecnología”.


Descargar PDF: El estadio de Wembley anota un gol perfecto con los análisis del tráfico (PDF 120 KB)

 

Para conocer más acerca de los productos Brickstream, visite nuestra página de recuento de personas, ¡aquí